Alma Anderson

In Loving Memory of Alma Azucena Anderson Castillo

Alma Azucena Anderson Castillo, affectionately known as "Azu," was a remarkable woman who dedicated her life to caring for others. Born on June 4, 1949, in San Juan Ostuncalco Quetzaltenango, Guatemala, she embodied love, compassion, and selflessness throughout her journey.

For 38 years, Alma worked as a nanny, wholeheartedly devoting herself to the children under her care. Her nurturing spirit touched the lives of many young souls, leaving an indelible impact. Not only did she nurture the young ones, but she also served as a caregiver for the elderly, bringing comfort and joy into their lives.

Alma's culinary skills were renowned among her family and friends. Cooking brought her immense joy, and sharing meals with loved ones was her way of expressing love and warmth. Whether it was a simple plate of tortilla con queso or traditional Guatemalan delicacies like tamales, carne adobada, chorizo, and pupusas, Alma's food always had that special touch of love.

One of Alma's greatest joys in life was seeing her family come together. She cherished the loud conversations filled with laughter and the beautiful memories they created. Family gatherings were occasions for celebration and an opportunity to strengthen their bond.

Her endearing personality was characterized by love, care, compassion, humility, and hard work. Alma's genuine nature made her approachable to all who crossed her path. She found happiness in helping others and placed their needs above her own without hesitation.

Alma's hobbies encompassed two significant elements of connection - making phone calls and listening to music. When she picked up the phone to call someone, it was never just a mere exchange of words; it became an hour-long conversation filled with genuine interest and warmth. And when she wanted to relax and unwind, the soothing notes of marimba filled her heart with tranquility.

Being a mother to her children and witnessing her grandchildren's success brought Alma immense pride. Her happiest moments revolved around the achievements and happiness of her loved ones. The legacy she leaves behind in her family is one of love, unity, and unwavering support.

On December 11, 2023, Alma Azucena Anderson Castillo left this world, leaving a void that will be deeply felt by all whose lives she touched. Although grieving her loss, we find solace in the memories we shared with her and the impact she made on our lives.

Family and friends mourn the loss of Alma while cherishing the moments they were blessed to have with her. She is survived by her loving daughters - Sheila Ismenia Rivera, Michelle Renee Garcia, Kimberly Martinez - and her devoted son Michel Antonio Garcia. She also leaves behind her brother Victor Manuel Castillo Escobar and sister Carola Marilena Ralda Escobar.

As we bid farewell to Alma Azucena Anderson Castillo, let us remember the love she shared, the care she provided, and the indomitable spirit that defined her character. Her legacy will forever live on in our hearts as a reminder to cherish every moment with our loved ones and to extend kindness to those in need.

May you rest in eternal peace, dear mamií. Your memory will forever be engrained within us.



Version En Español

En Memoria Amorosa de Alma Azucena Anderson Castillo

Alma Azucena Anderson Castillo, conocida cariñosamente como "Azu", fue una mujer extraordinaria que dedicó su vida al cuidado de los demás. Nacida el 4 de junio de 1949 en San Juan Ostuncalco Quetzaltenango, Guatemala, encarnó el amor, la compasión y el altruismo a lo largo de su viaje.

Durante 38 años, Alma trabajó como niñera, dedicándose de todo corazón a los niños bajo su cuidado. Su espíritu protector tocó las vidas de muchas almas jóvenes, dejando un impacto imborrable. No sólo cuidó a los más jóvenes, sino que también sirvió como cuidadora de los ancianos, trayendo consuelo y alegría a sus vidas.

Las habilidades culinarias de Alma eran reconocidas entre su familia y amigos. Cocinar le brindaba una inmensa alegría y compartir comidas con sus seres queridos era su forma de expresar amor y calidez. Ya fuera un simple plato de tortilla con queso o delicias tradicionales guatemaltecas como tamales, carne adobada, chorizo ​​y pupusas, la comida de Alma siempre tuvo ese toque especial de amor.

Una de las mayores alegrías de Alma en la vida fue ver a su familia unirse. Apreciaba las conversaciones ruidosas y llenas de risas y los hermosos recuerdos que creaban. Las reuniones familiares eran ocasiones de celebración y una oportunidad para fortalecer su vínculo.

Su entrañable personalidad se caracterizó por el amor, el cuidado, la compasión, la humildad y el trabajo duro. La naturaleza genuina de Alma la hizo accesible a todos los que se cruzaron en su camino. Encontró la felicidad al ayudar a los demás y antepuso sus necesidades a las suyas sin dudarlo.

Los pasatiempos de Alma abarcaban dos elementos importantes de conexión: hacer llamadas telefónicas y escuchar música. Cuando cogía el teléfono para llamar a alguien, nunca se trataba de un mero intercambio de palabras; se convirtió en una conversación de una hora llena de interés y calidez genuinos. Y cuando quería relajarse y descansar, las relajantes notas de la marimba llenaban su corazón de tranquilidad.

Ser madre de sus hijos y ser testigo del éxito de sus nietos le enorgulleció inmenso. Sus momentos más felices giraron en torno a los logros y la felicidad de sus seres queridos. El legado que deja en su familia es de amor, unidad y apoyo inquebrantable.

El 11 de diciembre de 2023, Alma Azucena Anderson Castillo dejó este mundo, dejando un vacío que será sentido profundamente por todas aquellas vidas a las que ella tocó. Aunque lamentamos su pérdida, encontramos consuelo en los recuerdos que compartimos con ella y el impacto que tuvo en nuestras vidas.

Familiares y amigos lamentan la pérdida de Alma y al mismo tiempo aprecian los momentos que tuvieron la suerte de tener con ella. Le sobreviven sus queridas hijas - Sheila Ismenia Rivera, Michelle Renee García, Kimberly Martínez - y su devoto hijo Michel Antonio García. También deja atrás a su hermano Víctor Manuel Castillo Escobar y su hermana Carola Marilena Ralda Escobar.

Al despedirnos de Alma Azucena Anderson Castillo, recordemos el amor que compartió, el cuidado que brindó y el espíritu indomable que definió su carácter. Su legado vivirá para siempre en nuestros corazones como un recordatorio de apreciar cada momento con nuestros seres queridos y de brindar bondad a los necesitados.

Que descanses en paz eterna, querida mamií. Tu recuerdo quedará grabado para siempre en nuestro interior.